El mundo del regional mexicano vuelve a estar sacudido por la tragedia. Esta mañana, la Fiscalía de Tamaulipas confirmó que los cinco cuerpos calcinados encontrados días atrás en un predio de Reynosa pertenecen a los integrantes de Grupo Fugitivo, banda originaria de dicha ciudad.
Los músicos fueron vistos por última vez el pasado 25 de mayo, cuando ofrecieron una presentación privada. Desde entonces, desaparecieron sin dejar rastro, y el silencio que rodeaba su paradero terminó con una noticia devastadora que ha causado conmoción entre seguidores y colegas del gremio.
Aunque no se han revelado detalles oficiales sobre los responsables, versiones apuntan a que el crimen organizado estaría involucrado en el caso, sumando así otro capítulo oscuro a la historia del regional mexicano, un género que, lamentablemente, ha estado marcado por la violencia.
La violencia que ha ensombrecido al regional mexicano no da tregua. Las letras crudas, la cercanía con contextos sociales peligrosos y la fama no exenta de riesgos han convertido a este género en uno de los más golpeados por la tragedia.
Grupo Fugitivo se une, tristemente, a la lista de artistas que perdieron la vida de forma violenta. Su música quedará como testimonio de su talento, mientras sus familias y seguidores claman justicia y piden alzar la voz para frenar esta dolorosa cadena de pérdidas.